La zona lindante con Empedrado es hoy por hoy el foco del tráfico de pescado en el río Paraná. Este lunes, Recursos Naturales y Prefectura secuestraron 300 kilos de manguruyú a los mismos acopiadores que depredan las aguas cada día.
La depredación y el tráfico de pescado continúan en el río Paraná con secuestros de grandes cargamentos por parte de Prefectura y la Dirección de Recursos Naturales.
Este lunes la zona de Derqui fue nuevamente blanco de contrabandistas que acopian pescado de manera ilegal a la espera de camiones frigoríficos que en muchos casos buscan llevar la carga a la frontera con Paraguay, donde el precio duplica al de Argentina.
En el último operativo se secuestraron 300 kilos de manguruyú, especie protegida cuyo sacrificio está terminatemente prohibido hace varios años. Con el agravante que se trata de los mismos pescadores furtivos a los que ya se les había secuestrado 3000 kilos de dorado y 3000 de surubí meses atrás.
A estos secuestros se suman 3800 kilos de surubí y manguruyú a una canoa y a una camioneta entrerriana.
En todos los casos el modo de acopio ilegal se repite: varias canoas dejan la carga en precarias viviendas a la orilla del río congelando el pescado en condiciones insalubres y aguardan la llegada de los transportistas.
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